En nuestra ciudad las lagunas de almacenamiento de lixiviados - en el basuro de Navarro -estan totalmente llenas, mientras la última de ellas, (La Laguna 6), está ocupada con el 60% de su capacidad.Este antiguo basuro, arroja cada día 7 litros por segundo de lixiviados. La capacidad de la actual laguna, es de 384.000 metros cúbicos, pero está llegando a su final. Hasta ahora, el Municipio, a través de Emsirva, no ha concretado la firma de un contrato para el tratamiento de lixiviados, que cumpla con los estándares ambientales establecidos por la CVC.
El riesgo ambiental para la ciudad aumenta, pues la última laguna se llenará en los próximos meses y se deberá construir una nueva para almacenar los lixiviados; Esta nueva construcción se calcula en un valor cercano a los $600 millones. Además, se genera incertidumbre porque los espacios de terreno para construir una nueva laguna se están agotando y solo quedaría espacio para dar al servicio una sola laguna.
La última laguna fue construida entre los meses de diciembre de 2008 y febrero de 2009, siendo puesta en funcionamiento en marzo del presente año.
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