Tres botellas de plástico que habían estado en la basura pueden convertirse en una camisa de moda gracias a un proceso de reciclaje y confección que llevan a cabo empresas colombianas (Enka y Fabricato).
En Colombia se desechan más de 1.500 millones de botellas de polietiléno tereftalato al año (PET, un tipo de plástico muy usado en envases). Estas botellas tardarían más de cien años en degradarse mientras que, por el momento, la planta de Enka tiene capacidad para procesar 11.000 toneladas de botellas PET al año.
Esta transformación de un envase viejo en ropa nueva es posible porque los recipientes PET se elaboran con los mismos derivados del petróleo, con los que se fabrica el poliéster. Proceso: Incluye picado, lavado y granulado, asi se extraen prácticamente todos los derivados del petróleo que están en las botellas.
Luego se elabora una fibra sintética que posteriormente se tejerá hasta formar una tela.
El proceso para conseguir la resina reciclada requiere un 92% menos de energía que la necesaria para fabricar el poliéster hecho con materias primas vírgenes.